El ministro de Economía Luis Caputo afirmó días atrás que están dadas las condiciones para que la recuperación económica se acelere, luego de la recesión registrada en la primera mitad del año por el impacto de la devaluación, y el ajuste fiscal. Sin embargo, los economistas vislumbran una recuperación lenta por efecto del plan de shock monetario en el marco de la fase 2 del plan económico.
Caputo se mostró optimista en la reunión que mantuvo el martes último con directivos de la sociedades de Bolsa a quienes les dijo que la «economía está empezando a crecer», luego de que el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) mostró en mayo -último dato oficial- un crecimiento de 1,3% con respecto al mes anterior, cortando una racha de ocho meses de caídas mensuales, y una suba de 2,3% en la comparación interanual.
Pero los expertos explicaron que el impulso estuvo dado principalmente por el sector agropecuario, cuya base de comparación se vio afectada por una sequía histórica en 2023.La consultora Eco Go calculó que, «sin agro, el EMAE de mayo hubiera registrado una caída del 5,5% interanual».
En este contexto, los analistas plantean que en los próximos meses el aporte del agro será menor, y por el plan de shock monetario, y hasta que no haya un entorno macro más normalizado, la dinámica de la actividad no podrá ser la de un crecimiento sostenido. Así desechan las chances en el segundo semestre de una recuperación en forma de V (caída con rebote) como vaticinaba el presidente Javier Milei.
Actividad económica: lenta recuperación
El sondeo del Centro de Estudios Económicos Orlando Ferreres arrojó que la actividad económica creció en junio 0,6% contra mayo, y tuvo una contracción de 3% interanual. «El dato de junio se ubica así 2% por arriba del piso que se tocó en marzo», precisó
Fausto Spotorno, director de la consultora Ferreres, estimó en una charla virtual organizada por la sociedad de Bolsa Cohen que «parecería que en el segundo trimestre tocaste un piso, y creo que en algún momento del tercer trimestre va a empezar a verse algo de recuperación».
Lautaro Moschet, economista de la Fundación Libertad y Progreso, comentó a iProfesional que «tras el muy buen dato de EMAE de mayo, comenzamos a ver signos de recuperación en la economía». Y alegó: «A pesar de que los datos sectoriales de junio que comenzaron a publicarse son mixtos, esto no implica necesariamente que la actividad seguirá cayendo. Una recuperación no significa que veremos variaciones mensuales positivas todos los meses, sino que la tendencia general debe ser creciente».
La consultora FMyA señaló que «más datos terminan de confirmar que junio fue bastante negativo, excepto agro, en un mes donde impactaron la mayor cantidad de feriados (hubo 3 días hábiles menos que el año pasado)» pero resaltó que «en julio, ya se anticipa un mes más positivo, por ejemplo en patentamientos que hubo un fuerte repunte (+23% mensual autos y +13% en motos), Confianza de Consumidor (Di Tella) subió 2 p.p. a 39% (ya más cerca de niveles de diciembre), y además la brecha con el blue puede haber movido más al sector de construcción, autos y moto»
En sintonía, Maximiliano Ramírez, socio-director de Lambda Consultores también cree que «en términos de actividad lo peor ya pasó». Pero de cara al segundo semestre, sostuvo que «el plan de shock monetario genera un impacto sobre el nivel de actividad, con el plan económico que están mostrando, con la sequía de pesos, la recuperación va a costar».
Asimismo, Francisco Ritorto, analista de ACM, dijo que «la recuperación no está siendo homogénea, los sectores más competitivos (agrícola, petróleo y gas, explotación minera) traicionan, mientras lo más ligado al mercado interno (industria, comercio, etc) continúa retrocediendo».
«Parece poco probable una recuperación en tipo de V pero algunos factores dan algunos indicios positivos: en los últimos dos meses hubo una recuperación de los salarios reales y se reactivó el crédito al sector privado. Si bien estamos lejos de ver el repunte, podemos esperar un lento proceso de recuperación en los sectores más perjudicados por el ajuste, como es el caso de la industria», pronosticó.
Por su parte, la consultora Outlier planteó que «la decisión del gobierno de implementar un esquema de venta de dólares en el segmento de dólares financieros con el objetivo de secar aún más la plaza de pesos, necesariamente derivará en un encarecimiento real de la liquidez en pesos», y «al mismo tiempo también tuvimos la venta de puts de los bancos al BCRA, lo cual se traduce en mayor iliquidez para las entidades financieras».
«Creemos que ambas cuestiones podrían derivar en un endurecimiento de las condiciones del crédito al sector privado durante en el segundo semestre (respecto de lo que vimos en mayo y junio), que sumadas al mayor ruido e incertidumbre asociada a la flexibilización del control de cambios pueden implicar una mayor ralentización del sendero de recuperación de la actividad. En sentido opuesto deberían jugar el RIGI y el blanqueo», analizó.
Actividad económica: ¿cuáles son las perspectivas para el tercer trimestre?
Alan Versalli, analista de Eco Go, esgrimió que «las expectativas para el segundo semestre, están atadas al plano cambiario, en la medida que se consigan dólares, a través del RIGI y el blanqueo, se evite una devaluación y continúen recuperándose los ingresos, la economía continuará recomponiéndose lentamente»
«En este sentido, el plan monetario anunciado por el gobierno no ayuda, básicamente por implica una menor acumulación de reservas para el BCRA. En la medida que escaseen los dólares se hace más probable un escenario con un nuevo salto cambiario que vuelva a trastocar la actividad. Que la recuperación sea sostenida o no, depende de que aparezcan los dólares y que el programa financiero cierre», aseveró.
En este marco, Versalli indicó que el escenario base de Eco Go es que en el tercer trimestre la economía registre un crecimiento de 0,1% (sin estacionalidad)» y subrayó que . «sería el primer crecimiento intertrimestral en el año traccionado fundamentalmente en la mejora en el consumo como consecuencia de la desaceleración de la inflación». En tanto, proyectan una caída de 5,1% en la comparación interanual.
En la misma línea, Ramírez prevé en el tercer trimestre una suba de 0,1% contra el segundo trimestre, y una retracción de 5.2% interanual. Según su visión, «recién para fines del tercer trimestre o principios del cuarto vamos a ver una recuperación» y piensa que uno de los drivers «puede ser el blanqueo,que genere incentivos en la actividad de la construcción».
«Va a ser fundamental el tema de liquidación de los exportaciones, no solo para mejorar reservas sino también para el tema de actividad. Porque un punto importante es cómo incentivas que vengan las inversiones. Las inversiones vienen si mostras un plan consistente, y hoy por hoy depende de lo que suceda con la acumulación de reservas que es la pata floja que el gobierno está mostrando. Y lo otro es que hay que conseguir que el riesgo país se ubique por debajo de 1.100 puntos. Ningún inversor va a venir invertir con un riesgo país en 1.600 puntos», advirtió.
Ritorto puntualizó que «esperamos que el tercer trimestre registre un incremento de 0,5% respecto al trimestre anterior sin estacionalidad».
¿Qué factores serán claves para una recuperación sostenida?
Ante este panorama, Versalli comentó que «esperamos recuperación lenta, en forma de pipa de nike, condicional a que no haya un nuevo salto devaluatorio». Y aseguró que «para que la recuperación sea consistente, debe estar impulsada por la inversión». Y agregó que «si bien hay varios anuncios relacionados al RIGI, será fundamental despejar la incertidumbre que genera la salida del cepo, el cuándo y el cómo».
Ramírez tampoco ve chances de una recuperación rápida en forma de V sino que avizora «una dinámica en L o sea con estancamiento» porque prevé que los sectores relacionados con servicios y comercio «van a seguir paralizados».
La consultora Outlier enfatizó que «las medidas expansivas clave que pueden potenciar el desempeño de la actividad tiene que ver con la flexibilización del control de cambios y la reducción y posterior eliminación del impuesto PAIS» .
«La flexibilización del control de cambios es una medida clave para potenciar el RIGI y el blanqueo, y lo es en sí misma para terminar de destrabar decisionesde compras de bienes durable o semidurables y de inversión de agentes locales y extranjeros que hoy no fluyen como resultado de los altos niveles de represión financiera», explicó.
Asimismo, afirmó que «la reducción y eliminación del impuesto PAIS es clave para abrir la economía y devolver rentabilidad a los sectores exportadores que son los que deberían ser los drivers de la recuperación»
Por lo tanto, la consultora prevé que el punto de inflexión en la recuperación se registre en «el último trimestre del año» dado que «recién a fines de septiembre se avanzaría en la reducción de 10 puntos porcentuales de la alícuota del impuesto PAIS y la expectativa para avanzar en la flexibilización del CEPO también está puesta durante dicho período».
«En el transcurso del tercer deberíamos empezar a percibir más clara la recuperación. Nuestra proyección de recuperación es en forma de pipa (al menos hasta el último trimestre)».
De igual mirada, Moschet juzgó que «aún falta para poder hablar de un crecimiento sostenido», Y aseveró que «para trazar un claro sendero de crecimiento será necesario eliminar el cepo, que actualmente funciona como un freno de mano para las inversiones».
Asimismo, un informe del grupo SBS argumentó que «para poder ver un sendero de crecimiento sostenido aún falta bastante, en especial con relación a la claridad de reglas de juego que deberá brindar el gobierno de modo tal de favorecer la inversión y empleo privado, en un entorno seguro jurídicamente. Vemos como fundamental el avanzar decididamente con relación a la remoción, idealmente eliminación, de controles de cambios»
«No esperamos una dinámica muy virtuosa en materia de actividad hacia los próximos meses, en un contexto de continuidad del ajuste. Si bien la sanción del RIGI y el blanqueo de capitales podrían traccionar parcialmente hacia el cuarto trimestre, debe apuntarse a un entorno de reglas de juego claras, y eso lleva tiempo«.