A principios del 2024, la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) anunció la apertura de una nueva residencia estudiantil ubicada en el microcentro de la ciudad, con el objetivo de facilitar el acceso a vivienda para alumnos del interior. «La residencia es una deuda de hace muchísimos años que tenemos nosotros para con los alumnos de la Universidad», explicó Matías Lingua de la secretaría de Bienestar Universitario y Modernización.
La residencia, parte de un edificio que alquilará la UNC, se encuentra en la esquina de las calles Tucumán y Deán Funes, a pocos pasos de diversas dependencias universitarias. Tendrá capacidad para albergar a aproximadamente 150 estudiantes, distribuidos en nueve pisos, ocho de los cuales serán destinados a habitaciones compartidas. Cada piso contará con entre cinco y seis habitaciones, y la cantidad de residentes por habitación puede variar entre dos y seis personas.
El noveno piso estará destinado a un espacio común y una sala de estudio, diseñada para fomentar el aprendizaje y la colaboración.
La gestión del lugar estará a cargo de la Secretaría de Bienestar Universitario y Modernización, que también supervisará el cumplimiento de los reglamentos, aún pendientes de aprobación por el Consejo Superior.
«En octubre nos lo entregan. Nosotros después tenemos que hacer toda la compra de equipamiento. Ya estaría listo para el año que viene», adelantó Lingua.
Entre los requisitos para acceder al alojamiento, los estudiantes deberán residir a más de 50 kilómetros de la ciudad y estar cursando su primer año en la UNC. Solo podrán vivir en la residencia por un máximo de un año. «Nuestra intención es brindar apoyo y contención a los ingresantes, con la esperanza de que durante su estadía en la residencia puedan formar vínculos. Quizás, el próximo año, algunos de ellos decidan compartir un departamento en otro lugar», indicó el secretario.
Además, los futuros residentes deberán realizar cursos sobre género y convivencia.
Visitas a la residencia
El rector de la UNC, Jhon Boretto, junto con la vicerrectora Mariela Marchisio y el secretario, recorrieron recientemente el edificio, donde se destacó uno de los principales avances: la sede del nuevo Comedor Universitario, que estará ubicada en la planta baja de la residencia y cuya apertura está prevista para octubre.
El proyecto no solo responde a la necesidad de alojamiento, sino que también representa una inversión importante por parte de la universidad. Mientras que la UNC financiará una parte significativa del costo, los estudiantes deberán cubrir el resto. «Nos cuesta como universidad unos $40.000 por chico, lo que es mucho más barato que si les diéramos ese dinero para alquilar en el mercado», detalló Lingua.
Actualmente, las residencias en Córdoba tienen un costo mínimo de 150.000 pesos mensuales. «Sin las comodidades ni el esquema de contención necesario para estudiantes. Acá te vamos a seguir y te vamos a acompañar en la trayectoria».
Las inscripciones para postularse a este nuevo espacio de alojamiento comenzarán en octubre, coincidiendo con la apertura de las becas universitarias. Según explicaron de la universidad, la expectativa es alta entre estudiantes y familias, que ven en esta iniciativa una solución a las preocupaciones habituales sobre dónde alojar a los jóvenes durante su primer año en la universidad. «Que la residencia sea de la universidad también les da cierta tranquilidad a los padres de que van a estar contenidos», concluyeron desde la Universidad.