Pärnu, una ciudad tranquila en la costa de Estonia, ha llamado la atención de los viajeros y podría ser el principal destino de verano de Europa. Según el periódico inglés The Sun, el lugar es considerado por los residentes locales como “la capital del Sol” y tiene una temperatura del mar que puede alcanzar los 33°C.
En 2018, Lonely Planet nombró al lugar como uno de los pueblos costeros menos conocidos. También recibe el apodo de “capital del verano”, pues es el destino al que acuden los estonios durante la temporada.
Su principal atractivo es la gran playa de arena de la ciudad, que alberga varios chiringuitos y la discoteca Sunset. En 2010, la temperatura del agua alcanzó un récord, al registrarse 33°C, aunque normalmente su promedio es de 30°C.
El destino superó un nuevo récord en este último verano europeo, con más de 15.000 turistas visitando el lugar en julio. También se celebran varios festivales anuales en la playa o cerca de ella. A principios de 2024, el festival Beach Grind acogió a Marshmello y Chase & Status.
En la ciudad hay edificios multicolores, que van desde el siglo XII hasta el XVIII. Uno de los hoteles más populares es el Hedon Spa and Hotel, que tiene desde sauna y piletas, hasta masajes con arcilla. Pärnu también cuenta con su propio aeropuerto.
O Globo/GDA