La magistrada encargada de juzgar el crimen de Samuel Luiz ya ha emitido su sentencia después de que el jurado popular hiciese público su veredicto a finales de noviembre. Catherine Silva, tal y como había fallado el jurado por unanimidad, es absuelta de los cargos que se le imputaban. No así los cuatro jóvenes mayores de edad juzgados por la paliza mortal a Samuel.
Diego Montaña, el joven que inició la disputa con Samuel, es condenado a 24 años de prisión por asesinato con agravante de discriminación, al entender que su reacción se debió a la animadversión que sentía hacia las personas homosexuales, y cinco años de libertad vigilada. Al ver que Samuel iba con un móvil le dijo: «Deja de grabar, a ver si te voy a matar, maricón», y a partir de ahí, se desencadenó el ataque mortal. En realidad, el joven de Arteixo estaba hablando con una amiga por videollamada.
A Alejandro Freire, la magistrada le impone una pena de 20 años por asesinato sin agravantes y cinco años de libertad vigilada. Él fue el que tiró por primera vez a Samuel al suelo, cogiéndole desde atrás.
Kaio Amaral ha sido condenado a 17 años de prisión por asesinato y a cinco años de libertad vigilada; además de a tres años y medio por el robo del móvil de la víctima.
Alejandro Míguez, que fue considerado cómplice de asesinato por el jurado, recibe un castigo de diez años de cárcel y cinco de libertad vigilada.