Katia Sosa, la jugadora que se sumó hace pocos días a Gran Hermano, atravesó dificultades de tránsito lento. Por más de 5 días, la motoquera no pudo cumplir con sus necesidades biológicas y se empezó a sentir mal. Sus compañeros la ayudaron con distintas alternativas para solucionar el problema intestinal.
«La nueva, la Tana, estuvo muchos días sin ir al baño. Pero al final pudo…», anunció Santiago Del Moro, conductor del reality show, al presentar el insólito informe en donde se ve un recorrido por las distintas técnicas a las que recurrió la jugadora para lograr su objetivo.
Primero, se observa una conversación de Katia con Ulises Apóstolo en donde le cuenta que hace casi una semana que no puede ir al baño. «Me estoy sintiendo mal…», se sinceró la última participante en ingresar a la competencia. Fue entonces que, frente al drama de Sosa, Petrona Jerez le ofreció «tirarle del cuerito».
Boca abajo, Katia se dejó curar con el método casero por su compañera. Pero Petrona aseguró que no estaba empachada. Luego, llegó el turno de probar con una cucharada de azúcar, considerando que lo dulce activa el movimiento intestinal. Pero tampoco dio resultado positivo.
KATIA RECURRIO AL MASOSANTA DE LA CASA
Ante el paso de los días y como su problema que se iba acrecentando, Katia recurrió a la ayuda de Claudio Di Lorenzo. En este caso, boca arriba sobre la cama de uno de los cuartos, el terraplanista y experto en Reiki le hizo una sesión especial. Le «acomodó» los chacras.
Con imposición de manos, Claudio recorrió parte de las zonas afectas en el cuerpo de su compañera que le estaban impidiendo ir al baño. Un rato después. la Tana pudo pasar por el baño de la casona en la zona de Martínez. Y finalmente hacer sus necesidades a pura felicidad.