En el rincón rojo, Eduardo Feinmann. En el azul, Jony Viale. Cualquier anunciador de esos tan característicos que tiene el boxeo podría prestar su vozarrón para presentar al cruce como «La pelea del año» o «El enfrentamiento de dos pesos pesados del periodismo político» o «El combate estelar entre dos de los principales referentes mediáticos que tiene el oficialismo». Cualquiera sea el título, se trata de una intensa pugna que registra muchos antecedentes y recrudeció en las últimas horas con acusaciones de todo tipo.
Al mejor estilo de Muhammad Alí-Joe Frazier, Sugar Ray Leonard-Mano de Piedra Durán o Erik Morales-Marco Antonio Barrera, épicas rivalidades del pugilismo que tuvieron tres versiones cada una sobre el cuadrilátero, Feinmann y Viale se vienen «dando duro y parejo» desde hace largo rato y ya son una suerte de superclásico del periodismo político argentino, si bien adhieren a la misma línea de pensamiento contraria al peronismo. Mucho más teniendo en cuenta que Feinmann es de Boca y Viale fanático acérrimo de River.
Los choques empezaron cuando trabajaban juntos en La Nación + y uno debía darle el pase al programa del otro. Empezaron los celos, las quejas y las sospechas por un supuesto «robo de invitados» y tanto el pase como la cordialidad se esfumaron como la bruma otoñal a media mañana. Las agresiones se acrecentaron cuando Javier Milei asumió la presidencia y los dos vieron satisfechos sus deseos de que el PJ perdiera poder y presencia.
Ya desde canales diferentes (se dice que Feinmann planteó la dicotomía «es él o yo» y así Viale debió emigrar a TN) parecen pelear ahora por ver quién es más cercano al actual gobierno nacional. La crisis que enfrenta la ministra de recursos humanos Sandra Petovello, jaqueada por los casos de corrupción que se descubrieron en su cartera y que para Jorge Rial le costará el puesto en pocos días más («tiene el boleto recontra picado», aseguró el ex Intrusos) provocó que los dardos se intensificaran.
EL BRUTAL ENFRENTAMIENTO ENTRE EDUARDO FEINMANN Y JONY VIALE
Feinmann apuntó directamente a Viale por un informe suyo donde contó que habían intentado forzar el ingreso a la vivienda de Petovello, algo que se comprobó que no había sucedido. «La fiscalía que inició las investigaciones no encontró absolutamente nada. Ayer un preiodista oficialista, en otro canal no, en una suerte de programa que es casi un 6-7-8 de este gobierno, diciendo «¡Entraron en la casa de Petovello!». ¡A la miércoles! Iba creciendo… Yo dije «bueno, a la miércoles». ¿Entrar a la casa que significa? Abrieron la puerta, la rompieron, entraron al lìving, a la habitación. ¡No ocurrió nada de eso! ¡Nada!» gritó Feinmann delante de Esteban Trebucq y el abogado y panelista Gabriel Iezzi.
Furioso, Feinmann agregó que fueron tan sólo «¡Unos perros que labradaban! A mi me suena a pura victimización. Y me da vergüenza haberme solidarizado con la nada misma. La verdad. Porque era angustiante cuando contaron la primera información. Me da vergüenza haberme solidarizado con la victimización de esta señora Petovello. Fueron hasta los de rastros, y todo, qué se yo… ¡Dios mío! Por eso digo..que se yo… nada. Punto. Cuando recibimos la información de la fiscalía de que no había pasado nada dije «¡Nooo! Pucha, cómo nos podemos solidarizar con la nada misma, con un intento de victimización horrible. Qué se yo. ¡Nada!». La repuesta de Jony, seguramente, será terrible.