RECESIÓN
La afectación es en todos los segmentos industriales, solo comparable al peor momento de la pandemia y ya golpea de modo significativo el empleo. No hay «V» en el horizonte de corto plazo.
La actividad industrial se derrumbó 14,2 por ciento interanual en abril y provocó la destrucción de más de 15 mil despidos en el sector, advirtió la Unión Industrial Argentina (UIA) en su informe sobre los niveles de producción en el cuarto mes del año.
Dentro de un escenario de fuerte recesión, el único dato positivo fue un alza del 4,5 por ciento en los niveles de producción respecto de marzo, pero el propio informe se ocupa de relativizarlo al detallar que marzo fue un mes especialmente negativo, por lo que el rebote no termina de indicar que el sector fabril haya tocado piso.
Afirma el mismo informe que el leve repunte en abril en comparación con marzo fue porque hubo mayor cantidad de días hábiles y se normalizaron cuestiones puntuales de importaciones de insumos que paralizaron algunos sectores en marzo.
Para terminar de configurar el cuadro de gravedad, abril 24 fue el onceavo mes de caída interanual consecutiva cuando se acepta que hay recesión cuando se producen 2 trimestres consecutivos de caídas.
El primer cuatrimestre de 2024 acumuló una baja de 12,4% interanual y los datos de mayo reflejan que esa caída persiste. En la serie mensual podría observarse un amesetamiento o leve caída. Se pone de relieve que los datos del mes estuvieron afectados por las dificultades en el comercio con Brasil por las inundaciones en el sur de ese país.
Pero luego se resalta que las bajas fueron especialmente pronunciadas en el sector Automotor (-27,9%), en Despachos de Cemento (-27,1% i.a.) y en los patentamientos de maquinaria agrícola (-22,9% i.a.).
Un dato relevante para industrias siempre es el consumo de electricidad, que continuó cayendo; la demanda de energía eléctrica de Grandes Usuarios Industriales volvió a caer (-11,3% interanual).
En cuanto al intercambio comercial con Brasil, se registró una caída en las importaciones (-42,8% i.a.), y las exportaciones (-3,9% i.a.). Finalmente, la Liquidación de divisas (que creció durante los primeros tres meses del año) volvió a caer (-38% i.a.).
El informe resalta que todos los bloques industriales tuvieron caída, algo que solo tiene comparación con los peores meses de la pandemia en 2020.
Si bien la actividad podría estar cerca de un piso, el sector industrial enfrenta dificultades por la baja demanda, así como aumentos de costos.
El reporte hace espacio para recomendaciones políticas. Al cierre del resumen ejecutivo señala: “Será importante que, en la medida que haya una recuperación del mercado interno, la misma no sea canalizada únicamente en mayores importaciones, sino que traccione una recuperación de la producción local y el empleo”.
Este cierre no sorprende. Es que en marzo, el empleo asalariado registrado en la industria aceleró su caída. Se perdieron 4.881 puestos en el mes y la baja acumulada es de 15.357 respecto de agosto del año pasado.