En una propiedad ubicada en pleno barrio de Villa Crespo, en Buenos Aires, el trío “Modo Diablo”, conformado por Duki, YSY A y Neo Pistea, dio origen en 2017 al movimiento del trap argentino, un estilo que combina elementos del reggaetón, hip hop, electrónica y música urbana. Ubicada en Antenaza 247, recibió el nombre de “La Mansión” luego de ser alquilada por los jóvenes artistas para vivir ahí.
A pesar de que la estadía fue solo por ocho meses, el lugar adquirió un aura sagrada: su fachada es un mural repleto de garabatos donde todos los días se acercan fanáticos a firmar sus paredes, a sacarse fotos y pasar un rato en el lugar. La propiedad tomó principal relevancia cuando YSY A compuso un álbum llamado “Antezana 247″, pero también fue el escenario que utilizó Duki para grabar el videoclip de la canción “Rockstar”.
Hoy, la casa cargada de historia musical y urbana está en el mercado inmobiliario nuevamente. La residencia se encuentra a la venta por US$850.000, pero también está la posibilidad de alquilarla por US$5300 mensuales.
“Cuando decidimos alquilar la casa en 2017 no conocíamos al trío, al pasar los meses nos dimos cuenta quiénes eran”, cuenta Alejandro Farache, uno de los dueños de la propiedad, quien tardó meses en devolverla a su estado original ya que “cuando la entregaron estaba detonada”. “Creo que el estado de abandono fue una de las causas por las que los jóvenes decidieron dejar la casa, ya que, entre las fiestas y la cantidad de personas que entraban y salían se convirtió en un lugar inhabitable en poco tiempo”, agrega.
A pesar de los destrozos que sufrió, la propiedad hoy se encuentra en buen estado, luego de que el propietario decidiera mudarse allí con su familia hasta hace unos pocos meses. “Lo que más me llamó la atención cuando volví a ingresar a la casa fue encontrarme con un estudio de tatuajes armado en el sótano y uno de grabación en el quincho. Tenían toda la casa tomada, no había ningún metro cuadrado sin usar”, señala.
El inmueble ubicado en uno de los barrios más transformadores de Buenos Aires, en donde conviven lo tradicional con lo moderno, con un creciente auge de bares, galería de arte y locales musicales, se presenta como una oportunidad para instalar proyectos vinculados con el arte y la música. “Se convirtió en un lugar turístico y un sitio de culto para los amantes del trap, por eso lo mejor es que pueda convertirse en un espacio al que los fanáticos puedan ingresar y disfrutar de la mística que hace única a la propiedad”, sostiene el dueño.
La propiedad, de 630 m² construidos, incluye 10 ambientes, distribuidos en dos plantas, con cuatro dormitorios, dos baños completos, dos toilettes, y una cochera. Su distribución ofrece posibilidades tanto para uso residencial como comercial, con espacios que se prestan a estudios de grabación o propuestas gastronómicas y culturales, en sintonía con la vibrante oferta del barrio. “Decidimos darle un enfoque más comercial para encontrar la forma de capitalizar esa cantidad de gente que se acerca al lugar y poder generar un negocio que gire en torno a esa mística”, explica Martín Pinus, dueño de la inmobiliaria homónima que comercializa el inmueble.
“La característica principal de este lugar es la cantidad de gente que se acerca todos los días a la puerta, que es justamente ese público fanático de los tres artistas que pasaron por allí y del trap argentino en general”, agrega Ramiro Rodriguez Melgarejo, bróker de Martin Pinus Real Estate. El furor por la casa es tal que “a solo pocas horas de publicarla, ya tuvieron varias consultas”, cuenta.
Con más de 50 años de antigüedad, esta casona porteña conserva un encanto particular que la hace única. Su planta baja, de casi 60 m², es un amplio salón iluminado por grandes ventanales que dan acceso a un jardín exterior y un quincho privado. En el centro del living, una escalera de mármol sube a un entrepiso que puede ser utilizado como escritorio o sala de estar. Además, justo al lado del salón de estar y comedor, se encuentra una espaciosa cocina con comedor diario, dos baños, un garaje y un sótano que ofrece espacio de almacenamiento adicional.
En la planta alta se encuentran el dormitorio principal en suite ubicado al frente de la propiedad, y otro dormitorio con balcón terraza, también con vista a la calle. Las otras dos habitaciones están orientadas hacia el jardín en la parte trasera. Uno de estos cuatros cuenta con un espacio adicional que puede ser utilizado como escritorio o incluso como quinta habitación. En el techo se puede acceder a una amplia terraza transitable de 50 m² descubierta con vistas al jardín.
LA NACION
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