El mercado de fichajes de Arabia Saudí se ha cerrado hasta el próximo verano, momento que ha aprovechado Vinicius para aparecer en las pantallas de Real Madrid Televisión y dejar un mensaje a los madridistas. Algo con cierto tufillo de oportunismo ahora con la ventana de traspasos cerrada y justo en el momento en el que se ha abierto en la grada el debate sobre su posible venta al fútbol saudí, lo que reportaría al Real Madrid unos ingresos que vendrían bien a las arcas.
Gesto de cara a la galería
Vinicius ha dejado un mensaje que invita al optimismo de los madridistas: «Con 24 años, con 7 temporadas aquí, estar haciendo historia es algo muy importante para mí y toda mi familia. Ojalá poder seguir aquí por muchos más años». Sin embargo, ese «ojalá» resta contundencia a su declaración, en la que el brasileño no termina de ser categórico. Algo que en las oficinas del club se ha entendido como un gesto de cara a la galería más que una declaración sincera del futbolista hacia el club.
El Real Madrid trabaja desde hace tiempo en la renovación del contrato del futbolista, pero tanto Vinicius como su agente, Frederico Pena, no han respondido a esos primeros acercamientos. El club es consciente de que tiene una oferta astronómica encima de la mesa de Arabia, 200 millones anuales netos, a la que el Real Madrid no se puede ni acercar. Y por eso trabaja en hacer más atractiva la oferta para convencer al futbolista.
Vinicius, que volverá a jugar este sábado con los blancos en Cornellà después de perderse los partidos ante el Valladolid y el Brest por acumulación de amonestaciones, ha marcado ya 101 goles con la camiseta del Real Madrid y está a un paso de alcanzar a Ronaldo Nazario como brasileño con más goles en el club. «Es muy importante poder llegar a 100 goles y entrar en la historia de este club», advertía a ese respecto.
Venderlo, «un negocio redondo»
El dilema que se abre ahora es que parte del madridismo, incluidos directivos de la planta noble del Santiago Bernabéu, se muestran favorables a su traspaso a Arabia aprovechando la explosión de Mbappé y Rodrygo, además de la presencia de Bellingham. Estiman que la venta de Vinicius supondría «un negocio redondo» porque sería una inyección económica que resolvería algunos contratiempos que ha sufrido el club con el sobrecoste de la remodelación del estadio y su explotación, y normalizaría el ambiente del vestuario, donde la llegada de Mbappé ha cambiado el equilibrio de egos de la plantilla.
El Real Madrid sigue esperando que Vinicius y su agente se sienten a negociar la renovación para hacer realidad sus palabras: «…y seguir aquí muchos años». Mientras lo consiguen ven cómo el fútbol saudí sigue tratando de seducir a jugadores de la plantilla blanca. El último en recibir una oferta ha sido Rodrygo, que vive su momento más dulce desde que está en el club. El brasileño, que suma diez goles y cuatro asistencias en los últimos once partidos, ha informado al club del acercamiento de Arabia, pero su intención sigue siendo cumplir el contrato que tiene firmado con los blancos hasta 2028 y que cuenta con una cláusula de rescisión de mil millones de euros (como la de Vinicius).